Cambios

El foso es por lo general, sólamente un pozo de piedra debajo de la arena, con un túnel o escalera de salida para que los perdedores puedan ascender al nivel de las gradas para ver el resto del partido. Por otra parte, como otra opción pasiva para los perdedores, se puede añadir un pozo de agua. Muchos constructores de estadios utilizan, en cambio, un pozo de lava como una consecuencia más intimidante al perder, y para hacer el juego mucho más divertido. Se suelen colocar cofres alrededor del estadio llenos con palas, y también para que los participantes guarden sus objetos de valor para que no los pierdan si pierden o mueren.

Idealmente, el campo (o estadio) deben ser muy grande, más de 32 x 32 bloques de tamaño. Las paredes están hechas de cualquier bloque con el que rodear la arena, y por lo general se creará una zona elevada para los espectadores. El campo Spleef o superficie en la que el juego tiene lugar, por lo general, se hace con lana, que gracias a su variedad de colores, los constructores de estadios suelen utilizarla par hacer preciosos patrones o diseños para la superficie, pero se puede hacer con cualquier otro bloque. Sin embargo, no es aconsejable un diseño elaborado, ya que después de una partida de Spleef, los jugadores normalmente parchean la superficie con bloques al azar en lugar de mantener el diseño previo.